BMW M8 2020: 625CV, Coupé o Cabrio

El BMW M8 2020 ya está aquí y BMW ha querido presentar el modelo por todo lo alto, sin mostrar sus versiones con cuentagotas cada ‘X’ meses: estará disponible con carrocería cupé y cabrio y, junto a las versiones “normales” también estarán las Competition, con una puesta a punto todavía más radical.

La marca bávara no se ha salido de lo esperado en términos de imagen, es perfectamente reconocible el BMW Serie 8 pero con añadidos que hacen que sea todavía más radical. Cuenta con paragolpes específicos, las entradas de aire son todavía más grandes, la carrocería está surcada por líneas de tensión, el difusor trasero aloja dos salidas de escape dobles, calza llantas forjadas de 20 pulgadas y el techo es de CRFP y tiene doble burbuja. Éste, en los cabrio, es sustituido por una capota de lona multicapa que se abre y cierra en 15 segundos a velocidades de hasta 50 km/h.

Lo importante, sin embargo, se encuentra bajo el capó. Ahí espera un motor 4.4 V8 TwinPower Turbo que desarrolla 600 CV en los M8 base y 625 CV en los Competition, compartiendo en ambos casos el par máximo de 750 Nm. La caja de cambios de serie es una Steptronic de 8 relaciones y el sistema de tracción el xDrive, sin embargo, este último permite dos modos de tracción a las cuatro ruedas (uno más deportivo) y otro en el que toda la fuerza del motor va directo a las traseras.

Superfrenos para el M8

Todas las variantes cuentan con un sistema de frenos de acero perforado con discos de 395 mm delante y de 380 mm detrás, mordidos por pinzas de seis pistones y monopistón, respectivamente; aunque opcionalmente están disponibles unos carbocerámicos con diámetros de 400 y 380 mm. 

No es el único elemento mecánico que destaca, pues en la lista podemos incluir la dirección M Servotronic con desmultiplicación variable, la suspensión adaptativa con amortiguación controlada electrónicamente o el selector de modos, que permite optar por los Road y Sport en los BMW M8 estándar y suma el Track en los Competition.

Con todo esto el BMW M8 Competition en 3,2 y el M8 Competition Cabrio en 3,3 segundos. La velocidad máxima de todos ellos es de 250 km/h, limitada electrónicamente, aunque puede desbloquearse hasta 305 km/h con el paquete M Driver.

Fuente: Alex Morán, Autobild.